Creía que mi matrimonio iba bien, hasta que mi mejor amiga me hizo una pregunta

Life Lessons

Creía que mi matrimonio iba bien, hasta que una amiga me hizo una pregunta.

Me casé muy joven, por amor. Estuvimos juntos cuatro años antes de dar el sí. Hemos pasado de todo.

Llevamos más de seis años viviendo juntos. Confío plenamente en mi marido, y también en mí misma. Él es dulce, cariñoso y atento. Siempre me ayuda en las tareas de casa. No es el hombre más valiente ni fuerte, y tampoco diría que es guapo, pero tiene un alma tan bondadosa que irradia positivismo. Su fe en lo bueno de la vida es como un faro, dándome fuerzas para superar los momentos más difíciles.

Sin embargo, es indeciso. No sabe tomar decisiones, le aterra salir de su zona de confort y avanzar. Además, es extremadamente tímido. En estos seis años juntos, no ha cambiado en absoluto.

No se preocupa por su salud ni por su aspecto. Cualquier cambio lo asusta. Mi marido es casi diez años mayor que yo. Tengo veintiséis años y adoro la vida. Tengo un buen trabajo, he comprado mi propio coche y estamos pagando la hipoteca de nuestra casa. Pero hace poco, mi amiga me soltó: “¿Para qué lo necesitas?”.

Ese fue el fin de mi felicidad. Ahora estoy aquí, preguntándome: “¿De verdad lo necesito?”.

Rate article
Add a comment

eighteen − 6 =