Author: Javier Martínez
Una mañana, mi padre iba en coche al trabajo y paró en una gasolinera para repostar. Allí había una chica embarazada de 19 años pidiendo limosna.
Durante el divorcio, un marido adinerado decidió dejarle a su esposa una granja abandonada, perdida en medio de la nada. Sin embargo, un año después, ocurrió
¿Quieres a mi marido? ¡Es tuyo! dijo la mujer con una sonrisa dirigida a la desconocida que apareció en su puerta. «Espera un momento, Lucía.
En el portal número seis, donde en los rellanos siempre flotaba ese olor a paraguas mojados y cemento viejo, la primavera se notaba especialmente.
**Un patio en sintonía** El patio de un bloque de pisos en las afueras de una gran ciudad despertaba con el bullicio de siempre, donde cada uno tenía su lugar.
La maleta estaba junto a la puerta, cerrada con cremallera, como el último detalle antes de marcharse. Lucía ajustaba nerviosa la correa de su bolso, lanzando
**Hasta el próximo verano** Afuera, el verano se asoma con días largos y hojas verdes que se pegan al cristal de la ventana como queriendo proteger la
**El Puente de la Primavera** Por las mañanas, la escarcha se aferraba al río y las maderas del viejo puente crujían bajo los pasos. En el pueblo, la vida
**La Temporada de la Confianza** A principios de mayo, cuando la hierba ya lucía un verde intenso y el rocío aún perlaba los cristales de la terraza por
**Diario de Lucía** Por desesperación, acepté casarme con el hijo del hombre adinerado que no podía caminar… Y un mes después me di cuenta…









